CIUDAD DE MÉXICO.- El panorama para 2017 luce sombrío. Sin embargo, los protagonistas del musical El hombre de La Mancha, tal cual lo dice la canción principal de esta historia, creen que puede soñarse lo imposible hacia un mundo mejor.
Benny Ibarra, Ana Brenda Contreras y Carlos Corona brindaron en el Teatro de los Insurgentes por la llegada de un nuevo año y por el cierre de un ciclo que les dejó un grato sabor de boca.
Uno de los motivos fue el teatro: la representación, durante esta temporada decembrina y desde hace más de 100 funciones, de este musical inspirado en un momento de incertidumbre del escritor Miguel de Cervantes Saavedra.
En el encierro en prisión en España, el autor decidió recrear para los presos, vacíos de esperanza, a Don Quijote de La Mancha, el incansable soñador.
Es así como embona esta historia en el cotidiano del mexicano, con un mensaje de esperanza, tal y como lo cita Sueño imposible, tema musical principal de esta producción: “Será este mundo mejor si hubo quien, despreciando el dolor, combatió hasta el último aliento”.
“2016 fue el año más interesante que he tenido por la cantidad de trabajo tan disímil y retador para mí, que me sacó de mi zona de confort como ser parte de una aventura del tamaño de El hombre de La Mancha, con una historia fantástica, para meterme en la piel de Cervantes defendiendo al Quijote, así como a su vida, su obra y su trabajo.
“Es una historia con muchas capas, rica en imágenes, sentimientos y emociones. Tiene la capacidad de conectar con diferentes realidades o fantasías del ser humano. Por eso es muy importante en estas épocas, cuando hay tanta confusión en muchas circunstancias y sentidos y nuestra capacidad de aceptar a los demás, de ver el bien en vez del mal y de soñar juntos como sociedad jamás se había visto tan retado como en los últimos años.
Es una obra no sólo para pasarla bien, sino para limpiar emocionalmente nuestro corazón, alma, espíritu y mente para pelear contra los dragones de esta complicada realidad”, expresó Benny Ibarra minutos antes de salir a escena.
Efectivamente, 2016 fue un año en el que no sólo encabezó este musical, sino también se estrenó como uno de los protagonistas de la película Un padre no tan padre, junto a Héctor Bonilla, finalizó una de las giras musicales más exitosas, la de Sasha, Benny Erik, e hizo doblaje para la cinta animada Sing: !Ven y canta!
El siguiente año no será menor, pues tiene a su cargo la producción del disco de El hombre de La Mancha, que incluirá los números musicales que cada noche lleva a escena junto a la compañía.
Hice todo lo posible para que me soltaran el proyecto a mí y le pondré todo el corazón. Será la tarea del próximo año y eso me llevará un mes. Luego me pondré a componer y estaré en esta obra, espero, durante mucho tiempo”, señaló el actor antes de brindar.
Ana Brenda Contreras, quien recrea a Aldonza, la musa inspiradora de don Quijote evocada después como Dulcinea, destacó que este musical ha sido un gran regalo en cada una de las noches representadas.
“Me emociono mucho al subir al escenario para hablar del sueño imposible y de que el mundo puede ser mejor, luego del tránsito y de ver las noticias de todo lo que pasa en el mundo. La obra me recompone. El personaje exige mucho sentimental, emocional y vocalmente. Ha sido un gran reto para mí. Es una oportunidad para que la gente me conozca cantando y haciendo algo diferente”, dijo la actriz, quien estrenará en febrero de 2017 la película romántica El que busca, encuentra, dirigida por Pedro Pablo Ibarra, en la que comparte créditos con Ianis Guerrero y que fue filmada en San Cristóbal de las Casas.
Carlos Corona, quien recrea a Sancho Panza, precisó que este musical fue “luminoso” no sólo por la historia, sino por la compañía y el trabajo en equipo.
“Nos ha contagiado el espíritu de Alonso Quijano de luchar por la utopía y de estos momentos tan duros por los que pasa el mundo, el seguir creyendo que vale la pena hacer teatro y que el mensaje penetre en el alma del público.
“Siento que la gente está muy cansada y triste y que tiene ganas de ver ‘el mundo no como es, sino como debería ser’, como dice un texto de la obra. Siento que el público necesita encontrar un poco de luz tras las crisis financieras, toda esta vuelta que el mundo está dando a ser intolerante me da mucho miedo.
“El teatro siempre ha tenido un papel muy importante para reflejar lo que pasa y en este caso tratamos de iluminar un poco y pedir que no se canse uno en la lucha, quizá bastaría hacer lo que nos toca”, concluyó el actor, quien además estrenará para el otro año la obra El asesino entre nosotros, en la Casa del Teatro, que toca el tema de la violencia de género, y la película El tamaño sí importa.
A pesar del panorama sombrío, los actores sonríen, levantan sus copas y anhelan el sueño imposible. El telón está a punto de abrirse. Bienvenido 2017.