De ser condenado, el actor podría ser sentenciado a entre 50 años de prisión y cadena perpetua, según la fiscalía del distrito del condado de Los Ángeles.
Los abogados de Jace no niegan que su defendido haya matado a la víctima, pero dicen que datos de su iPhone 5S podrían mostrar pruebas de su estado mental cuando la mató a tiros, según el diario "The Los Angeles Times".
El teléfono no tiene las dificultades de acceso que en su momento llevaron al FBI a demandar al fabricante Apple para que desbloquee un modelo más nuevo en el marco de la investigación de la matanza de San Bernardino en diciembre de 2015.
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